martes, 11 de marzo de 2008

El regreso a casa (el pasado 29 febrero 2008)

En las antípodas se viven emociones de muy diversos tipos, emociones que se perciben y que se captan con entereza por todos los sentidos.
Así se aprecia en el ambiente los últimos retazos que quedan por vivir, antes de que el buque las Palmas traiga de vuelta a casa al equipo PERMAMODEL.
La meteorología y climatología como es sabido por los expertos no da tregua en la antártida. Y es que las actividades están condicionadas a esta variable algo predecible pero indomable.
Por la mañana hubo noticias del buque las Palmas que permanecería en la Isla Livingston recogiendo material de la base Juan Carlos I para enviarla a Ushuaia. Por esta razón, el equipo abandonaría la Isla Decepción por la tarde y no por la mañana como en un principio estaba estipulado.Conociendo todas estas noticias con anticipación, los integrantes pasaron los últimos momentos con los amigos de la BAE y la fauna de la isla.

El buque las palmas arribó a la hora de comer y por la tarde se hicieron los últimos preparativos y se hizo la transferencia de combustible a la base.
Con las lágrimas acompañando los rostros de los chicos la despedida estuvo cargada de emociones. El buque pasaría por la isla Livingston una vez más, esta vez para recoger al personal técnico científico y ocasión que aprovecharían algunos para despedirse de los que habían dejado a este lado de las islas Shetland del Sur.Finalmente, el grato reencuentro con los investigadores dentro de Las Palmas animará a cualquiera para afrontar una vez más la aventura del cruce del estrecho del Drake.